martes, 2 de abril de 2013

Vacaciones


Simplemente nunca debe de salir de tu cabeza, y debes aprender a vivir con ello, a valorar los mejores momentos y la exagerada enseñanza que gratuitamente te dieron.
Es un momento en el que sabes que es lo que quieres y que es lo que necesitas, sabes perfectamente los alcances, pero no las razones por las cuales vives. Es la historia que jamás cuentas, esa que tal vez disfrutas, esa que realmente vives.

La emoción se desvanece a cada minuto, cada segundo en el que estas solo, veinticuatro horas sin pronunciar palabra alguna, 24 horas conmigo.

El tiempo que tuve fue lo mejor, solo tienes que empezar a saber que nada es para siempre, que no todo dura el tiempo que necesitas y menos el que quieres.

Todo es tan volátil y pasajero que empiezo a creer que no existe mejor amigo que uno mismo y peor enemigo también, la persona que te hace más daño no viene del exterior, eres tú.
La manera en la que trato de huir de todo y de todos, y menos de mí, quisiera por un momento dejar de ser, dejar de pensar, dejar que todo pase sin que a mí me haga algún sentido.

Jamás esperes nada, que la nada es lo único seguro en este tiempo, y confiar demasiado altero mi estabilidad, pasas de querer hacerlo todo a no querer hacer nada. Gente va y viene y, tengo que seguir lidiando con lo mismo, conmigo y con la intolerancia que me tengo.

Erik Caliz Zamarripa 


No hay comentarios.:

Publicar un comentario